Tijuana, B.C. 17 de diciembre de 2025.
La reciente visita del astro de la UFC, Conor McGregor, a Tijuana ha puesto los reflectores sobre un tratamiento poco convencional: la ibogaína. El luchador irlandés fue captado en una prestigiosa clínica de la ciudad fronteriza, la cual se ha convertido en un centro mundial para terapias alternativas de vanguardia.

Pero, ¿qué es exactamente esta sustancia y por qué figuras de alto perfil están viajando a Baja California para probarla?
El origen y la función de la ibogaína
La ibogaína es un alcaloide psicoactivo que se extrae de la raíz del arbusto africano Tabernanthe iboga. En las últimas décadas, ha ganado terreno en la medicina alternativa por su capacidad para:
- Combatir adicciones: Se utiliza principalmente para interrumpir la dependencia química a sustancias como opioides, cocaína y alcohol, al «resetear» los receptores de dopamina en el cerebro.
- Tratar el TEPT: Exmiembros de las fuerzas especiales y atletas de alto rendimiento la buscan para tratar el Trastorno de Estrés Postraumático y lesiones cerebrales traumáticas.

¿Por qué Tijuana?
A diferencia de Estados Unidos, donde la ibogaína está clasificada como una sustancia de la Lista I (prohibida), en México su estatus legal permite que clínicas especializadas operen bajo protocolos médicos específicos. Tijuana se ha posicionado como el destino líder debido a su cercanía con EE. UU. y la calidad de sus servicios médicos privados.
El tratamiento es intensivo y suele durar varios días bajo estricta supervisión cardíaca y psicológica, ya que la experiencia puede inducir estados profundos de introspección y visiones vívidas. La presencia de McGregor refuerza la tendencia de las celebridades que ven en el turismo médico de Tijuana una solución a problemas que la medicina tradicional no ha logrado resolver.
