MÉXICO, 15 DE SEPTIEMBRE DEL 2025
Terence Crawford destronó a Saúl “Canelo” Álvarez como campeón unificado de los supermedianos la noche del sábado 13 de septiembre, arrebatándole los cinturones de la FIB, AMB, CMB y OMB. Pero lo que más llamó la atención tras la pelea no fue sólo la victoria, sino el acto de devolver todos esos cinturones al boxeador mexicano durante la conferencia de prensa.

Crawford ascendió a la cima del peso supermediano al vencer a Canelo, convirtiéndose en campeón indiscutido en esa división. Este logro lo sitúa como el primer boxeador en ganar los cuatro cinturones principales en tres categorías diferentes bajo la era de los cuatro títulos oficiales.
Aunque los cinturones oficiales ya le pertenecen a Crawford, él se los regresó a Canelo durante la conferencia de prensa tras el combate. Este gesto no tiene validez oficial los cinturones siguen siendo del nuevo campeón, pero se interpreta como un acto simbólico de reconocimiento hacia la trayectoria del mexicano.
Crawford comentó sentirse bendecido y despejado de dudas: dijo que muchos lo subestimaban y afirmaban que no podía llenar estadios o que no tenía carisma, pero que esta noche esas críticas habían quedado atrás. Además, reconoció la tradición en el boxeo de entregar los cinturones oficiales nuevos al ganador, dejando lo demás como símbolo, no como título.
Este gesto de Crawford va más allá de lo deportivo: evidencia que el respeto sigue siendo un valor importante en el boxeo, incluso en los momentos de derrota. Al elegir reconocer públicamente a Canelo, demuestra que la grandeza no solo se mide por victorias y cinturones, sino también por la manera en que se honran los rituales y se valora la historia.