ESTADOS UNIDOS, 20 DE MARZO DEL 2025.
El actor Anthony Mackie ha consolidado su estatus como una figura influyente en la industria del entretenimiento, no solo por su papel en el Universo Cinematográfico de Marvel (MCU), sino también por su visión estratégica en los negocios. Su creciente fortuna, impulsada por contratos millonarios con Marvel y lucrativas campañas publicitarias, refleja un enfoque financiero que va más allá de la gran pantalla, según reporta Prestige Online.

El ascenso en Marvel: de Falcon a Capitán América
La carrera de Mackie dio un giro decisivo en 2014, cuando se unió al MCU con el papel de Sam Wilson (Falcon) en Captain America: The Winter Soldier. Su participación en la franquicia lo catapultó al estrellato, llevándolo a aparecer en múltiples películas, incluidas Avengers: Age of Ultron , Ant-Man y Captain America: Civil War. Sin embargo, fue con la serie The Falcon and the Winter Soldier (2021) donde el actor asumió un papel protagónico, preparando el terreno para convertirse en el nuevo Capitán América.
Este ascenso no solo le otorgó mayor visibilidad, sino que también multiplicó sus ingresos. Según Prestige Online, Mackie cobró 100.000 dólares por su participación en Age of Ultron, pero su salario creció exponencialmente con el tiempo. Por Avengers: Infinity War recibió 4 millones de dólares, mientras que por la serie de Disney+ ganó 475.000 dólares por episodio, sumando 2,85 millones en total. Su mayor ganancia hasta la fecha proviene de Captain America: Brave New World, por la que recibió un pago de 10 millones de dólares, superando su patrimonio neto anterior, estimado en 8 millones.
Más allá del cine, Mackie ha sabido capitalizar su imagen con contratos publicitarios de gran alcance. En 2021, participó en una campaña para Hyundai junto a Elizabeth Olsen y Tom Hiddleston, promocionando el modelo Tucson. Asimismo, antes del estreno de Brave New World, protagonizó un anuncio para American Family Insurance, vistiendo el icónico traje de Capitán América. El spot superó las 350.000 visualizaciones en apenas tres días en el canal de YouTube de Marvel Entertainment, evidenciando su impacto como figura comercial.
Además de la publicidad, el actor incursionó en el mundo empresarial. En 2011, abrió el bar NoBar en Brooklyn, un proyecto que se expandió con una segunda sede en Williamsburg. Aunque ambos establecimientos cerraron en 2015, la experiencia evidencia su interés por diversificar sus fuentes de ingresos.
Inversiones inmobiliarias y estilo de vida
A diferencia de muchas celebridades de Hollywood, Mackie ha optado por establecer su residencia principal en Nueva Orleans, su ciudad natal. Según Prestige Online, el actor posee tres propiedades en la zona: una casa valorada en 783.995 dólares, otra de tres habitaciones estimada en 377.000 dólares y una tercera residencia de casi 1.100 metros cuadrados. Además, en 2006 adquirió un condominio en Brooklyn por 370.000 dólares, que en 2017 puso a la venta por 900.000 dólares, aunque finalmente lo retiró del mercado.
El caso de Anthony Mackie es un claro ejemplo de cómo una carrera en el cine, respaldada por decisiones estratégicas de negocios y alianzas publicitarias, puede traducirse en una notable estabilidad financiera. Su participación en el MCU no solo lo ha convertido en una figura clave dentro de la franquicia, sino que también le ha abierto las puertas a nuevas oportunidades comerciales.
Con un contrato millonario en Marvel, inversiones inmobiliarias y campañas globales, Mackie continúa ampliando su fortuna. Su capacidad para diversificar ingresos más allá del cine lo posiciona como un modelo de éxito en la industria del entretenimiento.